El uso de mezclas asfálticas en frío que utilizan como ligante a las emulsiones catiónicas ofrece enormes ventajas ambientales, técnicas y económicas respecto a las mezclas convencionales.
Es una tecnología versátil y sencilla, pero rigurosa en todas sus fases de aplicación.
Se aplican a temperatura ambiente y no requiere grandes instalaciones para su producción.
Se disminuyen los accidentes por quemaduras.
Disminuye la contaminación del medio ambiente y promueve el ahorro de energía.
Se optimizan los costos de la mezcla y del transporte.
Se disminuye el envejecimiento prematuro de la mezcla asfáltica.
Mejora la adherencia entre el asfalto y el árido.
Es resistente a lluvias imprevistas durante la aplicación.